2.912.091 espectadores mundiales y diarios tiene de media Twitch, la red social de los streamers. ¿Es interesante para tu empresa? 

Twitch es la expresión digital más reciente del directo. La plataforma, propiedad de Amazon que empezó especializándose en gamers, es ya  especializada en retransmitir contenidos en streaming, sin importar la tipología. ¿Encaja tu filosofía de marca con ella? ¿Cómo funciona Twitch a la hora de ayudarte con tus objetivos de negocio?

Este artículo es el primero de dos que van a tratar de hacerte ver cómo puede ayudarte Twitch si eres una marca. En este vas a encontrar ayuda y pistas sobre temas básicos, que seguro que ya conoces de otras redes sociales:

Must know 1: qué tiene Twitch que no tengan las demás

Antes de decidirte por invertir tu esfuerzo en esta red social debes saber si esta es adecuada para tu contenido. Por ello atiende bien a las características de esta plataforma:

  • Detrás de ella está Amazon, pero de forma bastante independiente. Aún así, cuenta con un soporte económico que le augura un buen (y largo) crecimiento.
  • Es la primera red social que garantiza que el contenido de valor sea monetizado, pues son los propios espectadores (y no las marcas con publicidad) quienes pagan a sus streamers favoritos.
  • Realmente se preocupa por la cantidad y calidad de contenido, pues premia a los streamers que más publican, pero también a aquellos con la comunidad más activa.
  • Los usuarios son de dos tipos: Viewers y streamers. En el siguiente punto tratamos esto un poco más a fondo.

En resumen, si tienes un contenido en vídeo interesante y duradero en el tiempo (como por ejemplo Primera Iberdrola, con partidos de fútbol recurrentes) y crees que puedes generar interés a largo plazo en una audiencia, seguramente quieras estar en Twitch.

Must know 2: cómo funciona Twitch a la hora de definir sus usuarios

La división simple entre viewers (la audiencia) y streamers (los creadores de contenido) se complejiza, pues dentro de cada uno de ellos hay tres tipos.

Los viewers pueden ser espectadores (audiencia esporádica hacia un contenido), seguidores (similar al resto de redes sociales, nos avisa del contenido de una cuenta en concreto) y suscriptores (donan 5€ mensuales a la cuenta, y el streamer decide darles acceso a diferentes ventajas como la participación en los chats). Todos pueden pagar con BITS, la moneda de Twitch (100 son 1,77 €) a sus canales favoritos.

En el caso de los streamers, la división es más compleja:

  • Un streamer básico no recibe monetización por su contenido, no puede hacer stream grupales y tienen las opciones básicas.
  • Un afiliado ya puede tener suscriptores y donaciones (reciben un céntimo por cada bit), 5% de comisión por la venta de juegos a través de enlaces en su perfil (no olvidemos que Twitch creció gracias a los gamers, por lo que les tiene un trato preferente) y pueden incorporar ingresos a través de publicidad.
  • Un partner tiene todo lo anterior pero añade herramientas para su canal, por ejemplo la personalización del canal, ser portada en Twitch, mayor tiempo de almacenamiento, stream grupal, retardo de emisión y asistencia prioritaria. Además, ganan el emblema de verificado.

Convertirse en un streamer profesional no es sencillo, pues requiere una dedicación y calidad de contenido que muchas marcas no pueden mantener. Si quieres tener perfil de afiliación es importante que emitas durante 500 minutos, siete días diferentes en los últimos 30 días, una media de 3 espectadores simultáneos y al menos 50 seguidores en tu canal.

Si lo que quieres es tener un perfil de partner, estos datos suben: 3 días a la semana, 25 horas mensuales, 70/80 espectadores por streaming y respectar las directrices de Twitch. Cuidado: si consigues algunos de estos títulos pero no mantienes las cifras, Twitch puede bajarte de categoría.

Para las marcas es interesante ser afiliado o partner pues pueden recibir ingresos por su contenido, hecho que no ocurre en otras redes sociales

Must know 3: la clasificación de contenido

La división que realiza Twitch en este aspecto es muy sencilla. Por un lado están las etiquetas, que son las que clasifican por temáticas (hay 41 de ellas, como por ejemplo “carreras y conducción”) y las categorías, que lo concretan aún más (por ejemplo el título del videojuego.

Las etiquetas se han quedado ancladas en la época dorada del gaming en Twitch, y no alcanzan realmente a todo el tipo de contenido. Es mucho mejor tener cuidadas las categorías, pues los viewers las vigilan mucho más de cerca.

Must know 4: la publicidad y el funcionamiento de Twitch

Hay varias formas de hacer campañas publicitarias en Twitch, y como marca debes estar familiarizada con ellas, pues a lo mejor no tienes un contenido en vídeo que pueda estar en Twitch, pero sí puedes llegar a tu audiencia a través de la plataforma.

Las más clásicas son los anuncios a pantalla completa, que se consiguen a través de Amazon o agencias afiliadas, y la publicidad en recuadros dentro del stream. No son recomendables, pues no encajan con la cultura de Twitch y además interrumpen la experiencia de usuario. La primera opción es la que más comentarios negativos recibe, aunque la segunda tampoco gusta mucho entre la comunidad de Twitch.

Las opciones más propias de Twitch son las colaboraciones directas con streamers. Aquí hay diferentes formas de hacer influence marketing: puedes crear un marco con tu logo para que lo ponga el streamer, puedes enviar un regalo que abra en directo… ¡el límite está en el storytelling!

 

Must know 5: la participación en los directos

Al igual que pasaba con las personas que pueden estar en Twitch, hay otra clasificación que afecta a cómo funciona Twitch en los directos. En este caso se dividen entre miembros pasivos (aquellos que pueden donar, seguir, suscribirse y consumir streaming) y miembros activos, que detallamos a continuación:

  • Los vips. Aquellos viewers que pueden hablar en el chat sin que les afecte el modo lento (un modo que permite a canales con mucha audiencia revisar solo los mensajes que le interesan) ni el límite por frecuencia de mensaje.
  • Los moderadores. Ayudan a gestionar el chat, incluyendo la expulsión o veto (12 minutos en configuración inicial) y la activación de chat lento (destacando solo a los suscriptores o seguidores).
  • Los editores. Pueden editar la información de las transmisiones, reproducir un anuncio, cargar vídeos, crear eventos, iniciar estrenos y repeticiones, descargar emisiones pasadas. Su papel es el más complejo de los tres.

Gracias a los miembros activos el streamer puede encargarse únicamente de generar contenido útil para su audiencia.

Y en el próximo capitulo…

En este artículo hemos hablado de cómo funciona Twitch para principiantes, investigando la herramienta en su faceta más técnica. En el segundo artículo veremos como hacer Twitch marketing, es decir, cómo podemos introducir esta plataforma en nuestra estrategia de marca.

Podrás ver consejos para trabajar tu canal (research), claves de analítica y los primeros pasos para participar en la conversación.

Puedes suscribirte a nuestra newsletter y recibir más contenido sobre inbound marketing y marketing de contenido.